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0 a 3 años, Alfitas

¡Adiós popó! Pasos para enseñarle a tu Alfita a ir al baño

Primero lo primero compa: el control de esfínteres es el aprendizaje de “ir al baño”, un proceso por el cual se enseña a los Alfitas a controlar la vejiga y los intestinos. Se inicia a los 15 – 18 meses de edad, y generalmente la edad en la que se establece se sitúa entre los 18 meses y los 3 años.

Representa uno de los logros más importantes en la primera infancia, que le da al Alfita un sentido de autonomía, conocimiento y control de su propio cuerpo. Por eso es importante guiarlos y apoyarlos en este camino.

Requisitos para el control de esfínteres

  • Disipar la tensión. Tu Alfita debe sentir que cuenta con tu apoyo y acompañamiento compadre, por eso tienes que crear un ambiente de seguridad y confianza, donde sus logros sean reconocidos (aplausos, porras, abrazos).
  • Para empezar a enseñarle, el Alfita debe dominar la marcha (caminar sin ayuda) para poder ir al baño.
  • Se requiere que tenga la coordinación motriz y debe ser capaz de seguir instrucciones simples.

A considerar:

Es importante usar un vocabulario simple y sencillo para el niño o la niña. Por ejemplo: Nica, pipí, popó. Evitar usar palabras como: sucio, cochino, bueno o malo.

Ahora sí: el decálogo del control de esfínteres

  1. Elige la nica. Es importante que tú lo hagas: debe ser un modelo que no tenga obstáculos en frente y lisa para mejor limpieza. Dale chance a tu Alfita de que elija el color.
  2. Compra calzones entrenadores de tela (o pañales para esta etapa) que le ajusten bien.
  3. Ropa práctica, sin broches, sin botones, sin cinturón.
  4. Jugar con sus muñecas a que hagan pipí en la nica.
  5. Deja que explore la nica el primer día.
  6. Asegúrale un ambiente cordial y amable.
  7. Indícale cómo bajarse la ropa para sentarse.
  8. Cuando aprenda a ir al baño, háganle una ceremonia de despedida al pañal (se puede hacer inventando una canción, diciendo que ya no es un bebé).
  9. Cuando hayas desbloqueado este logro, adapta el sanitario con banco y asiento especial.
  10. La paciencia, la rutina y el acompañamiento en este proceso es clave.

Ahora ya o sabes compa, aprovecha esta info y consúltala cuando la necesites. Aprovecha el tiempo que tengas en casa para compartir tiempo de calidad, pero también para guiar a tu Alfita en cada etapa de su desarrollo.

Recuerda que tenemos un podcast en YouTube llamado Taberna Alfa. También puedes encontrarlo en Spotify. Sigamos aprendiendo juntos.

Fuente: Programa de Control de Esfínteres, UNAM.

Alfitas

Apego seguro: cuando tu Alfita crece con amor

La teoría del apego, surgida a finales del siglo pasado, sentó las bases para el estudio de las relaciones afectivas con un fundamento biológico. Gracias a ella, se empezó a mirar la necesidad de contacto y afecto que tenemos los seres humanos, no solo con “capricho de niños maleducados” o adultos inmaduros y codependientes.

Al grano papi: es momento que el apego es una parte biológica de la condición humana, y por eso te vamos a contar en qué consiste el apego seguro, para que lo pongas en práctica con tu Alfita sin miedo.

Apego seguro

Este tipo de apego se desarrolla cuando los niños tienen padres o cuidadores emocionalmente abiertos, perceptivos y cuya comunicación está asociada con las señales emitidas por el niño. En un apego seguro, cada uno de los miembros siente que comprende al otro y que es comprendido. Así que tratemos de entender el punto de vista de la cría y ponernos en sus zapatos. Es importante hacerlos sentirse entendidos y validados porque esto favorece al desarrollo de su cerebro y a la forma en que ellos socializan.

El niño con apego seguro

Tener un cuidador que se preocupe de manera sensible y responder a las necesidades del bebé, le dará un sentimiento de seguridad. El modelo mental de apego se construye a través de la repetición de cierto tipo de interacciones. Si el apego es seguro, el niño percibirá el mundo como un lugar seguro, confiable y habitado por personas en las que puede confiar. Esto lo hará más resiliente al estrés, aumentará su habilidad para balancear sus emociones y sus funciones cerebrales tendrán una mayor integración. De este modo, gozará de una mayor capacidad para establecer relaciones significativas en un futuro.

Los padres que promueven un apego seguro

Los padres de los niños con apego seguro tienden a ser adultos clasificados como autónomos, es decir, ellos también tienen un modelo de apego seguro. Este tipo de padres son conscientes de la importancia que tiene el tipo de relación que se construye entre padres e hijos, y sabes que como adultos ellos son los responsables de la calidad de esta relación.

Escuchando a los adultos hablar de su propia infancia se puede predecir el tipo de apego que tendrán sus hijos, pero no es por el tipo de experiencias que hayan tenido los padres, sino por cómo han elaborado su historia. Darle un sentido a nuestra vida, ser capaces de contarla de una manera coherente, es la mejor manera de predecir si nuestros hijos tendrán un apego seguro. La manera en que se cuenta la historia, y no su contenido, revela las características del estado de la mente de la madre o del padre en relación con el apego.

Es decir, los padres autónomos saben que sus Alfitas los necesitan, entienden que las necesidades emocionales de los niños son distintas a las del adulto, y por eso pueden ser flexibles. También saben que esto no durará para siempre y que el Alfita irá creciendo y haciéndose responsable de sí mismo. Estos padres son capaces de proveer un ambiente social suficientemente bueno al ofrecer un balance entre seguridad, reto y autonomía.

Recuerda que tenemos un podcast en YouTube llamado Taberna Alfa. También puedes encontrarlo en Spotify. Sigamos aprendiendo juntos.

Fuentes: No hay niño malo: 12 mitos sobre la infancia (Teresa García Hubard)

0 a 3 años, Alfitas

4 cosas que hacen los papás que crían Alfitas autosuficientes

Como seres humanos buscamos constantemente formas de colaborar y socializar con otras personas, pero también nos esforzarnos por lograr una autorrealización: descubrir qué puedo hacer por mí mismo. 

Entonces, ¿qué puedo hacer como padre para fortalecer este aspecto importante en el desarrollo de mi hijo? 

  1. Comienza temprano

Los Papás Alfa pueden fomentar la independencia con sus Alfitas incluso cuando son muy, pero muy pequeños. Desde muy chiquitos, los niños buscan completar las tareas cotidianas por su cuenta. Por ejemplo, los que están aprendiendo a comer sólidos querrán alimentarse solos o con cubiertos, sin importar que la comida termine en el suelo o embarrada en su carita. 

Es importante que los padres dejen a los niños sentir que pueden resolver las cosas ellos solos y refuercen su realización personal desde edades muy tempranas. 

  1. Celebra sus éxitos 

Cuando elogiamos a los niños se sienten orgullosos. El aumento de autoestima hará que tu Alfita intente ser independiente día con día. Cuando los padres “deshacen” una tarea que su Alfita ha realizado de forma independiente, dan un paso atrás. Por eso es fundamental celebrar cualquier logro, por más sencillo que sea, así lo motivarás a resolver los problemas de forma autónoma. 

  1. Aplazar acciones independientes 

Por ejemplo, si tu hija tiene la intención de ponerse los zapatos por ella misma, déjala que practique en el auto camino a su destino en vez de esperar en casa hasta que ella lo haga (sabemos que siempre tenemos prisa). Si tu hijo quiere llenar su propia botella de agua para llevarla a la escuela, dile que lo haga antes de acostarse para que esté lista la mañana siguiente. Para que el aplazamiento funcione, enséñale a los niños que “más tarde” no significa “no hacerlo nunca”. 

  1. Valora las pequeñas victorias 

Presta mucha atención a las pequeñas cosas que hacen los niños para ayudar a limpiar o recoger sus juguetes. Es posible que el niño guarde 5 de los 10 juguetes que estaban regados, pero resaltar esa pequeña victoria les indicará que fue una acción positiva, aquí tu labor es reconocer su esfuerzo y también motivarlo a completar al 100% todas sus tareas. Incluso algo aparentemente intrascendente como recoger una servilleta del piso sin que nadie se lo pida es una acción independiente.

Aunque la mayoría de los papás prefieren un camino más rápido a la independencia, darse cuenta de esos pequeños logros (y celebrarlos) hará que nuestros Alfitas se sientan motivados a resolver los problemas por sí mismos. 

Tú como Papá Alfa, ¿cómo le haces para criar un Alfita autosuficiente? 

Fuente: Fatherly.com 

0 a 3 años, Alfitas

Método Montessori: Checa estas actividades para hacer en casa con tu Alfita

¿Alguno de los compas de este clan ha escuchado sobre el método Montessori? Para quién no, les decimos qué es, cuáles son algunas de sus principales características, dónde se puede practicar y actividades para hacer en casa sus alfitas, basadas en ese modelo de enseñanza y aprendizaje.

Este método contempla una forma de educación muy completa que no solo se limita a las aulas, sino que abarca aspectos sociales y emocionales de los alfitas, para que sean pequeños disciplinados, conscientes, respetuosos y que actúen por un bien personal y comunitario, no por una recompensa.

María Montessori fue una educadora y médica italiana de principios del siglo XX y a ella se le atribuye este método; esquematizó por grupos de edades las habilidades, aptitudes, herramientas, técnicas y hasta materiales didácticos a usar con los niños.

A diferencia de la educación tradicional, el método Montessori puede comenzar a implementarse desde el nacimiento, en la que la “mente absorbente” de los alfitas ayuda a incorporar en ellos experiencias, relaciones, emociones, imágenes y cultura solo por el simple hecho de vivirlas.

La implementación de este método está divido por edades:

  • Desde el nacimiento hasta los 3 años
  • De los 3 a los 6 años
  • De los 6 a los 12 años
  • De los 12 a los 18 años

¿Qué beneficios hay en niños en los que se aplica el método Montessori?

A diferencia de la educación, como muchos de nosotros la conocemos, el método Montessori se centra en la confianza en el alfita, los adultos o profesores fungen como guía para que ellos puedan desarrollar problemas o tareas a su ritmo.

Estos son algunas de las características de los alfitas en los que se implementa el método Montessori:

  • Seguros, responsables e independientes
  • Capaces de reconocer sus emociones
  • Participativos en las tareas de la casa
  • Cuidado de sí mismos y del entorno que los rodea
  • Tienen gran sentido de la gracia y cortesía
  • Formulan sus propios conceptos
  • Son motivados a enseñar y colaborar
  • Son autodisciplinados y con capacidad de concentración
  • Aprenden a escribir partiendo de los sentidos (no de la memoria)
  • Desarrollan habilidades de solidaridad y empatía
  • Comprenden conceptos matemáticos
  • Se comprometen por enseñar a otros a comprender cosas

¿Dónde se puede practicar este tipo de enseñanza?

Este método puede estar incorporado en algunos planes de estudios de la educación básica y hay algunas instituciones que se especializan en este tipo de educación.  Sin embargo, como se explica antes, desde casa pueden comenzar a realizarse algunas actividades para presentar los conocimientos de otra forma y también para que adquieran algunas disciplinas.

Las siguientes son algunas actividades que le ayudarán a desarrollar varias habilidades y lo mejor, Alfa, es que se pueden realizar con cosas que se pueden tener en casa.

Esponjas y agua

Dale a tu alfita dos recipientes, uno con agua y otro sin nada. Con una esponja tendrá que pasar toda el agua de un lado a otro hasta que quede completamente seco. Acércale un trapo para que pueda limpiar en caso de que haya derramado algo de agua. Esta actividad representa un reto por que puede demorarse algo de tiempo y además será responsable de limpiar en caso de que haya salpicado.

Doblar servilletas

Doblar una servilleta de tela en un cuadro casi perfecto representa otro reto para niños de entre 3 a 5 años. Aunque para un adulto es algo “sin chiste”, para los alfitas requiere de mucha concentración. Muéstrale paso a paso la forma en la que debe hacerlo, haz que imite tus movimientos hasta conseguir el doblado perfecto y pregúntale también si cree que hay otra forma de llegar a ese resultado.

Fascinado con los cubiertos

Alfas, aprovechemos que a muchos de nuestros cachorros les gusta andar jugando con los tuppers, cazuelas o los platos; pídele que te ayude a guardar los cubiertos en el cajón donde deban estar separados por tipo: cucharas, tenedores y cuchillos. Primero explica los riesgos que existen de no tomarlos de una forma adecuada y confía en que puede hacerlo, sin embargo, no lo pierdas de vista.

Familias de botones

En la bonetería consigue de 20 a 30 botones de diferentes colores y tamaños; en un cono de huevos o en un molde para hacer pastelillos, pídele que los agrupe en cada apartado por colores independientemente si son más grandes o pequeños. Una vez que haya completado esa tarea, pregúntale si quiere organizarlos siguiendo otro patrón, por ejemplo, una familia de puros botones chicos o alguna en la que estén solo botones con cuatro o dos orificios.

Como te darás cuenta, este tipo de actividades no se centran en los conocimientos de la educación tradicional, pero sí les ayudan a trabajar otro tipo de habilidades como la concentración, tolerancia a la frustración, razonamiento, independencia y confianza en sí mismos.

Fuentes: Sitly.com / fundacionmontessori.org

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Mini Guía: Despídete de las rozaduras de tu Alfita

Las rozaduras son más frecuentes de lo que piensas, compa. No te sientas mal si tu Alfita tiene alguna, estos consejos te ayudarán a prevenirlas y tratarlas. 

La paternidad está llena de altibajos, de retos y también de rozaduras de pañal. Algunos papás primerizos presionan el botón de pánico antes de respirar hondo y resolver, por eso creamos esta mini guía que te servirá para la rozadura más severa hasta la más leve. 

  1. Más vale pañal limpio que alfita con rozaduras. Lo más importante para evitar rozaduras es mantener a tu bebé limpio. Sabemos que muchos pañales prometen la mejor absorción y muchas de horas de duración, pero la mejor decisión que puedes tomar es cambiarlo con frecuencia. Un pañal seco y una zona del pañal limpia marcan la diferencia. 
  2. Fuera pañales, hola libertad. Puede que te parezca muy extraño dejar a tu Alfita sin pañal por un rato podría hacer la diferencia. Permitirás que su piel respire y que esté seca, no tiene que estar así todo el día, será suficiente con algunos minutos después de cada cambio. 
  3. Las rozaduras leves se tratan igual que las severas. No pienses que por ser una rozadura pequeña debe ignorarse o por ser una grave debes tener miles de tratamientos. 
  4. Utiliza una pomada que contenga óxido de Zinc, como Capent, que además contiene vitaminas A, D y E que favorece la regeneración de la piel, para que tu alfita  se recupere pronto. Puedes utilizar esta pomada en cada cambio, incluso si no hay rozaduras, ayudará a evitarlas. Solo tendrás que aplicar una ligera capa para proteger su piel. 
  5. No perfumes la zona y evita irritantes en la piel de tu alfita. Lo mejor es que utilices algodón con agua para limpiar la zona del pañal; haz la limpieza con delicadeza y tu alfita estará muy bien pronto. 
  6. Tu alfita no tiene la misma piel que tú, utiliza productos especializados para él. La piel va cambiando con el tiempo igual que el pH, por eso no todos podemos usar las mismas cosas, utilizar productos agresivos pueden provocar reacciones en su piel. 

Estos son algunos consejos que te damos de alfa a alfa. Recuerda que los cuidados diarios evitarán momentos incómodos para tu alfita.

¿Qué otro consejo agregarías, compa?

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¿Cómo saber si mi Alfita tiene coeficiente intelectual alto?

Compa, ¿sospechas que tu alfita podría tener un coeficiente intelectual alto? Pues atento porque en este texto te decimos cómo puedes averiguarlo o si solo es que tu retoño está muy despierto, pero tiene un nivel inteligencia promedio.

Primero tenemos que ser muy observadores y objetivos: muchas veces como Alfa nos enorgullece que nuestros hijos sean listos, despiertos y puede que en ocasiones nos sorprendan sus habilidades de memoria o resolución de problemas matemáticos, sin embargo, eso no quiere decir que tengan un coeficiente intelectual alto, aunque no lo descartes.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la sobredotación intelectual como una inteligencia por encima de la media, que equivale a tener un coeficiente superior a 130 puntos, mientras que el promedio está en los 100 puntos.

En México se calcula que el 3% de la población infantil tiene un coeficiente intelectual alto, lo que en número gruesos equivaldría a un millón en el país ¿interesante, cierto?

¿Cómo saber si mi hijo tiene coeficiente intelectual alto?

El Centro de Atención al Talento, una alianza mexicana por la sobredotación, alerta que, de dicho porcentaje, algunos alfitas suelen ser diagnosticados erróneamente y los tratan como niños con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o Asperger, lo que hace que no se canalice de la mejor manera las características de cada alfita.  Ojo: la sobredotación y el TDAH no coexisten, es decir, no pueden presentarse en un mismo caso. 

En todo caso, si observas que tu alfita tiene algunas de las siguientes alertas, debes considerar que puede tener un Coeficiente Intelectual Alto:

  • Hiperactividad
  • Aprendizaje rápido
  • Distraído
  • Comprende y participa en pláticas de adultos
  • Busca conseguir siempre sus objetivos y plantea sus reglas
  • Baja tolerancia a la frustración 
  • Tiene habilidades para armar objetos, estructuras o rompecabezas

Como vez, algunos de esos puntos corresponden a algunos signos que apuntarían a un caso de TDAH, Asperger o en el peor de los casos, pueden contribuir a que se califique al alfita como rebelde, desobediente o maleducado.

¿Dónde y cómo puedo saber si mi alfita es un peque sobredotado?

Hay muchas evaluaciones de inteligencia que se pueden aplicar a niños que presenten dichas características; se realizan a través de exámenes psicométricos, sociales y hasta neuropsicológicos para determinar si, en efecto, se está frente a un caso de coeficiente intelectual alto. 

Alfa, no pierdas la oportunidad de sacarte esa espinita; échate un clavado a investigar un poco más a fondo.

A uno de los sitios donde puedes acudir es al Centro de Atención al Talento (Cedat) que tiene instalaciones en la CDMX, Edomex y Jalisco donde pueden aplicarle los exámenes necesarios a tu alfita para conocer si es un pequeñ@ sobredotad@.

Ahí se debe sacar una cita; expertos valorarán el perfil de tu retoño y determinarán qué estudios o pruebas se le aplicarán. En la primera cita se determinará si continúa en el proceso de evaluación o se dirige a otra área en caso de que no cumpla con los perfiles de sobredotación.

También puedes ir al Centro de Investigación y Servicio a la Educación Especial, CISEE A.C que trabaja en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En este lugar también realizarán evaluaciones de coeficiente intelectual a tu peque, como las de la Escala Wechsler para niños, que consta de 15 pruebas correspondientes a categorías como: comprensión verbal, razonamiento perceptivo, memoria de trabajo y velocidad de procesamiento.

Mi alfita tiene coeficiente intelectual alto ¿Qué hago?

Mas allá de conocer la calificación numérica de las pruebas y de saber que nuestro alfita tiene más de 130 puntos de inteligencia, debemos pensar qué condiciones deben tener para ayudarle a desarrollarse plenamente, ya que juntos se enfrentarán a necesidades y problemáticas a nivel personal, escolar, familiar y hasta profesional.

Confiemos en los expertos: si tu alfita obtuvo una calificación superior a 130, los especialistas sentarán las bases para el mejor desarrollo y canalización de su inteligencia y habilidades. Se suele recomendar la formación de redes de apoyo con personas cercanas al menor, como los padres, familiares cercanos, comunidad y escuela.

Recomendaciones: 

  • No idealices su potencial: pon los pies sobre la tierra y ve paso a paso con él en el proceso. 
  • No lo satures: aunque tiene habilidades por encima del promedio de otros niños, no olvides que necesita vivir su etapa infantil.
  • Fortalece la disciplina: es uno de los hábitos que más le ayudarán, pues con los niveles de inteligencia que tiene le será más fácil conseguir sus objetivos.
  • Relájate: aunque sepas que es un niño superdotado debes entender que no todo el tiempo tiene que hacer cosas brillantes; un número no define a tu alfita. 
Alfas, Alfitas

5 maneras de enseñar a tu Alfita a prevenir posibles abusos.

Seguramente en este clan hay muchos Alfas que han tenido esta preocupación.

Con el crecimiento, nuestros retoños pueden estar más expuestos a convivir con otras personas que no son los de su propia manada (papá, mamá y hermanos), ya sea porque se quedan al cuidado de personas externas a la familia o porque tienen que pasar más tiempo en otras actividades como la escuela, cursos, talleres o cualquier otra circunstancia en la que no podemos estar presentes.

Sabemos que afuera de nuestra cueva hay depredadores que pueden significar una amenaza para los alfitas; gente que puede llegar a realizar tocamientos indebidos o incluso abusar sexualmente de ellos.

Sin embargo, nosotros como padres podemos cimentar desde casa algunos hábitos y enseñanzas que le serán de mucha ayuda para prever cualquier escenario como los que antes planteamos, pero sobre todo para que los alfitas aprendan a cuidar y respetar las partes íntimas de su cuerpo, así como para que no normalicen conductas que los pueden poner en peligro.

Expertos de healtychildren.org y otros Alfas del clan recomiendan que los siguientes puntos se practiquen con alfitas desde los 2 años en adelante:

1.- No los obligues a dar besos o abrazos. Si tu alfita en algún momento no quiere saludar de esta manera a algún familiar o conocido, no lo fuerces. No es que sea “mal educado”. Respeta su decisión y recuerda que, muchas ocasiones, las agresiones sexuales provienen de miembros de la familia y personas cercanas. Basta con que salude de lejos con un “hola”.

2.- Enséñale su derecho a la intimidad. Desde saber identificar sus genitales y nombrarlos por su nombre, hasta no permitir que nadie toque sus partes íntimas, existen otras acciones sencillas que ayudan a que entiendan que tienen derecho a tener intimidad y pudor. Por ejemplo, no le cambies la ropa o pañal frente a más personas, aunque sean la abuela o los tíos.

3.- El semáforo corporal. Como si fuera un juego, practica con tu alfita qué partes son una zona verde o roja, entendiendo que las verdes son partes públicas y las rojas partes privadas, respectivamente. Enfatiza con ellos que no solo es un peligro que alguien los toque, los rozamientos y miradas lascivas también son una señal de alarma.

4.- Aprovecha los momentos. Alfa, no desperdicies las oportunidades para hablar con ellos de estos temas. Por ejemplo, platica con ellos en la hora del baño, al llevarlos a la cama o cuando estén por enfrentarse a situaciones nuevas, como un nuevo ciclo escolar o la salida a una excursión.

5.- Abusado con lo que ven en la TV, Internet o en casa. Recuerda que los alfitas son como esponjitas y tienden a imitar lo que ven tanto en la televisión, en internet o hasta en casa. Explícales que muchos comportamientos de adultos se pueden hacer hasta cierta edad y en lugares adecuados.

También sé muy cuidadoso en cómo tú muestras afecto a su mamá. Lo recomendable es que mejor vean muestras de cariño respetuosas, tiernas y amorosas; deja las “nalgadas picaronas” para un momento en el que los alfitas no estén.

De esta manera ellos cuidarán su cuerpo y no normalizarán comportamientos que tengan una connotación sexual; genera confianza con ellos por si en algún momento se enfrentan a una situación incómoda.

Por último: escucha e intenta comprender todo lo que dicen, a veces ellos, de una forma quizá escondida o entrelíneas, pueden informarte sobre situaciones de las que hay que estar muy pendientes.

Nacimiento alfita
Alfitas, Clan, Embarazo

Tips para que no te agarren las prisas el día de nacimiento de tu Alfita

El día del nacimiento de tu alfita es una de esas fechas que jamás se olvidan. Por ello es importante que previo a que llegue “el gran día” tengas la mayoría de situaciones planeadas, porque recuerda que “Alfa prevenido vale por dos”.

Estos consejos están pensados en Alfas que tienen carro, para los que tienen planeado tomar un taxi por aplicación o bien si le van a pedir a un amigo o familiar que les tiren paro de llevarlos al hospital.

Toma nota Alfa:

1.-Revisa con al menos una semana de anticipación los niveles de aceite, agua, anticongelante de tu auto.

2.-Asegúrate de tener una llanta de refacción lista en caso de ser necesaria, así como su respectivo gato y llave de cruz para poder cambiarla.

3.- Carga gasolina con días de anticipación y mantén el tanque con el combustible suficiente para que puedas llegar y no pierdas tiempo pasando a la gas.

4.- Mantén tu teléfono con suficiente pila (puedes conseguir un banco de carga portátil) y con crédito (te será de mucha utilidad en caso de alguna emergencia).

5.- Conoce la ruta que debes tomar para llegar al hospital; Alfas del clan han compartido qué previo al nacimiento de su criatura se dieron el tiempo para estudiar el camino que debían tomar. Eso te puede servir para tener un plan B en caso de que ese día haya algún tipo de bloqueo.

6.- Ten guardada en tu teléfono información básica, tanto tuya como de tu pareja. En el hospital te podrían pedir datos que no siempre son fáciles de memorizar, como son: el Número de Seguridad Social o direcciones de centros de trabajo.

7.- Ya que estamos en eso: prepárate un folder con copias de documentos como comprobantes de domicilio, identificaciones, CURPs, actas de nacimiento o papeles que les haya dado el seguro, en caso de atenderse en una institución de salud pública. Si puedes, saca unas dos copias de esos documentos y tenlas ala mano.

8.- Quizá está de más, pero, lleva dinero para cualquier eventualidad (no te olvides del cambio).

9.- Ayúdale a mamá a no pensar en cosas de las que te puedes ocupar tú: tengan preparada la maleta que se llevarán al hospital y asegúrate que no se les olvide nada (ropa de mamá, del alfita y documentos).

10.- Si estás de camino al hospital, encuentras tráfico y mamá está con contracciones, puedes sacar un pañuelo blanco y con éste ir ondeándolo; si tú vas manejando puedes hacerlo desde tu ventana e igual puedes ir tocando el claxon, esto avisa a los otros conductores que estás en una emergencia.

Si no puedes hacerlo, atora unas mantas blancas en los vidrios de las puertas traseras o delanteras para que con el viento se vayan ondeando.

Por lo regular si algún policía nota que llevas prisa por labores de parto, ellos mismos pueden ayudar a abrirte paso o incluso permitirte que tomes algún carril confinado. Pero recuerda: maneja con mucha precaución.

Sabemos que no siempre todos los Alfas tenemos la oportunidad de estar en ese día tan emocionante, ya sea por trabajo o por cualquier otra situación; sin embargo, más de uno de estos tips podrían ser útiles.

 

Baños de sol
0 a 3 años, Alfitas

¿Mito de las abuelitas o realidad? ¿Por qué los Alfitas recién nacidos deberían tomar baños de sol?

A ver, Alfas: ¿cuántas veces hemos escuchado que nuestras madres o abuelas recomiendan que demos baños de sol a nuestros retoños recién nacidos? ¿Es esto necesario?  En las siguientes líneas te contamos si hacerlo beneficia la salud de nuestros alfitas o si es solo un mito

Desde un remedio para el empacho, “curar de espanto”, o voltearlos de cabeza cuando se les sume la mollera, los baños de sol durante los primeros días de nacido son de esas recomendaciones que a muchos Alfas les podría generar cierta incertidumbre: ¿sirve para algo hacerlo; hay alguna evidencia científica que diga que sí se recomienda; le afectará a mi retoño?

Punto para las abuelitas

Los baños de sol sí son recomendables y en eso coinciden pediatras y neonatólogos.

Desde el momento en el que el alfita esté en casa y durante los días consecutivos, al menos durante dos semanas, se aconseja exponerlos al sol algunos minutos detrás de una ventana o cortina que ayude a filtrar los rayos solares para que no les queme directamente la piel.

Alfa, quédate al pendiente del reloj y asegúrate que al hacerlo no sobrepases los 10 o máximo 15 minutos, dependiendo de la intensidad del sol.

Si consideras que no hace mucho frío, puedes quitarle la ropa y dejarlo en pañal; haz que la luz solar toque sus extremidades, torso y espalda, pero ten cuidado con los ojos y en general con la zona de la cabeza.

Los momentos ideales del día para hacer esto son entre 9 y 10 de la mañana o por la tarde, después de las 16:00 horas, que es cuando la intensidad del sol comienza a disminuir.

Ojo: nunca cuando los rayos del sol están a todo lo que da.

¿Cuáles son los beneficios? ¿Qué dicen los expertos?

Expertos respaldados por la Fundación Carlos Slim aseguran que los baños de sol, de suma importancia durante los primeros días de vida del alfita recién nacido, aportan vitamina D, la cual es importante para el fortalecimiento de los huesos.

Además, ayudan a prevenir el raquitismo: una enfermedad producida por la falta de calcio, fosforo y una mala alimentación.

Los baños de sol también ayudan a eliminar el exceso de bilirrubina en la sangre de algunos alfitas, una situación que puede desarrollar una enfermedad llamada ictericia infantil, que se caracteriza por hacer que los pequeños tiendan a ponerse amarillos de la piel y ojos, señales de alarma que si identificas, debes acudir de inmediato al hospital.

La ictericia puede ocurrir porque el hígado de nuestro retoño no está completamente maduro como para eliminar ese pigmento biliar que da esos tonos amarillentos en los alfitas.

Estaba jugando con mi alfita

Relato de un Alfa que no sabía que eran necesarios los baños de sol.

Un Alfa de la comunidad nos compartió que pasó por días complicados luego del nacimiento de su primer alfita; no tenía idea de la importancia de los baños de sol y su hija terminó hospitalizada.

Esto dijo:

A los tres días de que mi mujer y mi alfita estaban en casa me di cuenta que mi princesa tenía los ojos medio raros, se le veían como amarillentos y hasta tristes.

Yo se lo comenté a mi esposa y corrimos al hospital, pues no sabíamos lo que podía ser.

Al llegar al hospital el doctor nos cuestionó:

–    ¿Sí le han dado sus baños de sol, verdad? Preguntó cómo si fuera algo obvio y que todos los papás debiéramos saberlo.

Respondimos que no, pues tan solo habían pasado tres días, y que no sabíamos que eso fuera algo que se tuviera que hacer de inmediato.

Mi alfita fue trasladada a urgencias y la internaron un par de días, debido a que tenía altos los niveles de bilirrubina en la sangre.

Fueron días complicados: mi esposa, aun lidiando con los malestares postparto, estaba cuidando a mi alfita en un área donde estaba conectada a una máquina de fototerapia, que emite una luz ultravioleta y la cual funge como los rayos del sol.

En ocasiones yo entraba a relevar a mi pareja unos minutos para que ella fuera al sanitario o saliera a comer algo.

Guardo en mi mente imágenes que jamás se me olvidarán. Sentía una impotencia ver a mi pequeña en la camilla conectada a unos aparatos, con sus manitas moreteadas por los piquetes que le daban las enfermeras.

Finalmente, tras varios análisis de sangre y días de cuidados, la pudieron dar de alta. Ahora ya tengo otro hijo y ya no me pasó. ¡Pónganse al tiro, Alfas!